Evangelio del dia

jueves, 15 de enero de 2009

Cristo es verdadera esperanza ante las sombras del mundo, dice el Papa

Al recibir este mediodía a los jefes y agentes de la Inspección de Seguridad Pública que sirven en el Vaticano, el Papa Benedicto XVI señaló que ante las sombras que preocupan a la humanidad, Cristo es la verdadera esperanza que debe estar encendida en los corazones de cada uno de los bautizados.

En sus palabras pronunciadas en la Sala Clementina del Palacio Apostólico Vaticano, el Papa se refirió inicialmente al trabajo de estos servidores y reconoció los sacrificios que realizan ellos y sus familias, a quienes también agradeció.

Seguidamente Benedicto XVI indicó que en el comienzo del nuevo año "son muchas nuestras expectativas y esperanzas. Sin embargo, no podemos escondernos ante el horizonte en el que se perfilan no pocas sombras que preocupan a la humanidad. Ante ellas no debemos desalentarnos, sino que debemos mantener siempre encendida en nosotros la llama de la esperanza".

"Para nosotros los cristianos, la verdadera esperanza es Cristo, don del Padre a la humanidad. Este anuncio es para todos los hombres: se encuentra en el corazón del mensaje evangélico, Jesús ha nacido, muerto y resucitado para todos", precisó.

El Papa también resaltó cómo "la Iglesia lo sigue proclamando hoy a la entera humanidad para que toda persona y toda situación humana pueda experimentar la potencia salvadora de la gracia de Dios que sola puede transformar el mal en bien. Solo Cristo puede renovar el corazón del hombre y convertirlo en un 'oasis' de paz; solo Cristo puede ayudarnos a construir un mundo en donde reine la justicia y el amor".

Seguidamente, el Santo Padre aseguró que "a la luz de esta esperanza, nuestro trabajo cotidiano, cualquiera que sea, asume un significado y valor distintos, porque lo ligamos a los valores perennes humanos y espirituales, que hacen nuestra existencia más serena y útil a los hermanos. Por ello, por ejemplo, en lo que concierne a su trabajo de vigilancia, éste puede ser vivido como misión".

Benedicto XVI explicó luego que este servicio al "prójimo, concerniente al orden y la seguridad y, al mismo tiempo" se hace "una ascesis personal, que permita también por así decir, una constante vigilancia interior que exige armonizar bien la disciplina y la cordialidad, el control de sí y la vigilante acogida de los peregrinos y turistas que vienen al Vaticano".

"Y tal servicio –continuó– realizado con amor se convierte en oración, oración más agradable a Dios cuando vuestro trabajo resulta poco gratificante, monótono y fatigoso, especialmente en las horas nocturnas o en los días en los que el clima se hace pesado. Y es cumpliendo bien el propio deber que cada bautizado realiza su propia vocación a la santidad".

Finalmente el Papa aseguró a los presentes "mi cercanía espiritual y os imparto a cada uno de ustedes una especial Bendición Apostólica, que extiendo con afecto a vuestro familiares y seres queridos".

(Aciprensa 15-01-09)

La cocina de Carlos

Carlos nos deja un par de nuevas recetas. Para verlas hacemos clic en cada una de ellas y se abrirán en una nueva ventana.

Hojita Parroquial Número 102

jueves, 8 de enero de 2009

Los niños son "riqueza y bendición del mundo" dice el Papa en Fiesta de la Epifanía

Durante el Ángelus que presidió este día feriado en Italia con ocasión de la fiesta de la Epifanía del Señor, el Papa Benedicto XVI pidió por los niños del mundo, especialmente aquellos que viven en países en conflicto o que son abusados en de diversas formas.

El Pontífice recordó que esta fiesta, en muchos países "es la fiesta de los niños", por ello dirigió "un pensamiento especial a todos los niños, que son la riqueza y bendición del mundo, y sobre todo a quienes les es negada una infancia serena".

"Deseo, en particular, llamar la atención sobre la decena de niños y jóvenes, en estos últimos meses, incluyendo el tiempo navideño, que en la Provincia oriental de la República Democrática del Congo han sido secuestrados por bandas armadas, que han atacado las poblaciones y causado numerosas víctimas y heridos", agregó.

El Santo Padre exhortó "a los autores de tal inhumana brutalidad, a que retornen a los niños a sus familias y a su futuro de seguridad y desarrollo, al que tienen derecho junto a aquellas queridas poblaciones".

Benedicto XVI señaló luego que "los episodios de violencia en relación con los jóvenes, que también se registran en otras partes de la tierra, aparecen aún más despreciables considerando que en el 2009 celebramos el 20° aniversario de la Convención de los Derechos del Niño: un compromiso en el que la comunidad internacional está llamada a renovar la defensa, tutela y promoción de la infancia en el mundo entero".

"El Señor bendiga a todos aquellos –¡y son numerosos!– que operan diariamente al servicio de las nuevas generaciones, ayudándolas a ser protagonistas de su futuro. Además, la Jornada de la Infancia Misionera, que se celebra en la fiesta de la Epifanía, es ocasión oportuna para evidenciar como los niños y jóvenes pueden jugar un papel importante en la difusión del Evangelio y en las obras de solidaridad hacia sus coetáneos más necesitados. ¡Que el Señor los recompense!", concluyó.

Cabalgata de Reyes en Coria


Misa de Nochebuena en la parroquia